miércoles, agosto 12, 2009

VIVIR EN PRISION

VIVIR EN PRISION

Casi la mitad de presos de A Lama está ya en módulos de convivencia
La masificación del penal impide ampliar la fórmula, imitada por otras cárceles


El centro penintencia de A Lama es ya el segundo de España con mayor número de módulos de convivencia, en el que los presos mejoran su calidad de vida y se les facilita la reinserción. Unos 800 internos, el 40% de la población reclusa, se benefician de este proyecto que es imitado por otras cárceles de toda España. La demanda para ingresar en los módulos es cada vez mayor pero la masificación del penal y del Centro de Integración Social de Vigo ralentiza el proceso. A día de hoy, entre A Lama y el CIS hay 1.933 presos, una cifra muy alta para poder mejorar la atención.

Alrededor de 800 presos internos en el penal de A Lama viven a día en los seis módulos de convivencia o respeto existentes (cinco de hombres y uno de mujeres con una planta preconvivencial). Es casi el 40% de la población reclusa la que forma parte de un proyecto que surgió hace diez años en la carcel de León, de forma experimental, y que trata de mejorar la calidad de vida del interno y de facilitar su reinserción. La demanda para ingresar en estos módulos es cada vez mayor. De hecho, en sólo tres años se ha pasado de una a seis dependencias de este tipo, convirtiéndose la cárcel de Pontevedra en la segunda de España con mayor número de ellas. El principal problema con el que se encuentra A Lama sigue siendo la masificación, a pesar de que ha logrado rebajar el número de presos en unos 80, todavía la población a la que da acogida está muy por encima de los 1.100 internos para los que se construyó. A día de hoy, entre A Lama y el CIS de Vigo hay un total de 1.933 presos, de los que 1.764 están en prisión y 169, en el Centro de Inserción Social de Vigo. El jefe de servicio, Nonito García, explica que lo normal sería que en cada módulo hubiera unos 80 presos, sin embargo, se está hablando de una cifra de entre 120 y 135, creándose en determinados momentos listas de espera para poder acceder a estos módulos. El movimiento de presos de un módulo a otro se ralentiza también porque dicha saturación afecta al Centro de Inserción Social de Vigo. Los propios presos aseguran que las instalaciones de Vigo deberían ampliarse para dar cabida a algunos de los que están todavía en prisión y así poder dejar sitio en las zonas convivenciales. El funcionamiento de estos módulos es ejemplo

para otros penales. Los reclusos aprenden a vivir bajo unas normas, a olvidarse de las drogas y mantener un comportamiento ‘exquisito’ gracias, entre otras cosas, a la ausencia de ociosidad. Las normas de ingreso no hacen referencia al delito, lo que supone que en estas zonas de la cárcel conviven reclusos con penas muy dispares y de diferentes nacionalidades. El jefe de servicio explica que la población extranjera abarca ya al 36%. Estos módulos están divididos por zonas separadas, pero los presos comparten actividades deportivas y culturales. Cada vez que ingresa un preso en prisión, se le informa de la posibilidad de ingresar en estos programas, aunque sea en régimen de preventivo. La demanda es tal que mientras que la situación ideal para estas zonas sería de unos 80 reclusos por módulo, en la actualidad se supera el centenar, llegando a estar en un número de entre 120 y 130. Los reclusos cuentan con el apoyo de educadores, trabajadores sociales y funcionarios, además del equipo médico y psicológico. El penal se enfrenta a hora a la Gripe A. La dirección realizará sesiones informativas de cara a la prevención. De momento, no se han dado casos, pero en caso de detectarse alguno se procederá al aislamiento del enfermo.

Publicado por ATLANTICO DIARIO el 09-08-09

martes, agosto 11, 2009

CONVIVENCIA FAMILIAR


El pasado día 18 de Julio, después de una mañana de intenso trabajo por parte de todos los internos del modulo, en la preparación del patio, de la limpieza general, de la colocación de mas de 40 mesa pequeñas y 5 de gran tamaño, todas ellas forradas con manteles para la ocasión, y desplegar toda una serie de instrumentos musicales, así como los altavoces, mesas de registro, con todo el cableado que esto conlleva, estabamos listos para recibir a los familiares invitados a la Fiesta Familiar, propuesta por el Educador, con el beneplácito de la Dirección del Centro Penitenciario, dicha Fiesta comenzó con el recibimiento de los familiares invitados con unos Gaiteros a los acordes de la música tradicional Gallega, acto seguido, se reunieron los internos con sus respectivas familias, y se fueron colocando en las mesas que a tal efecto estaban colocadas en el patio, luego se repartieron dichos familiares en dos grupos y fueron visitando todas las dependencias del modulo, un grupo empezó por las celdas, comedor y sala de estar, mientras el otro grupo visitaba las instalaciones de trabajo, biblioteca, sala de ordenadores, y demás departamento, intercambiándose los grupos una vez vieron las dependencias, luego vino la fiesta que teníamos preparada para los mismos con actuaciones de varios grupos de música, danza, y parodias, dichos familiares fueron agasajados con varios platos de comida y bebidas, todas ellas repartidas por una serie de internos preparado para el evento social, a mi entender dichos familiares quedaron contentos con la visita, con el recibimiento y agasajos a los que fueron atendidos, también se repartieron entre todos los familiares unos números, para la entrega de los trabajos realizados por los internos, en su estancia en el Centro, todos salieron contentos, de ver como se nos trataba y de las atenciones y servicios que nos prestan, para llevar mejor nuestra condena.
No todos los internos recibieron a sus familias, unos cuantos los que no somos de aquí o tenemos las familias lejos, nos quedamos un poco tristes de que las nuestras no pudieran estar presente, aunque nos atendieron de igual manera que si estuviesen nuestras familias, pero añoramos, que no estuvieran con nosotros.
También quedaron contentos con nosotros los que gracias a ellos se pudo llevar a cabo dicha fiesta, quedando en poder repetir la misma si se pudiese en otra ocasión, de lo cual estamos agradecidos, pues todo esto nos alegra y nos da fuerza para seguir cumpliendo con las penas impuestas a cada cual sea por el motivo que sea, pero vemos que entre todos creamos una familia unida en la cual existe una cordialidad y un respeto hacia los demás, como si fuésemos todos de una misma familia.
En definitiva, aunque yo fui uno de los tristes por tener a mi familia lejos y a la cual añoré, viendo a todos disfrutar de la suya, no por ello lo pase peor que los demás compañeros que tampoco vieron a los suyos consigo.
Al final a eso de las 7 de la tarde casi despedimos a los familiares y pasamos a seguir con nuestra vida normal dentro del recinto, agradeciendo a los organizadores el día de la Familia 2009